A pesar de esta topografía, el concejo representa el primer ámbito de cierta horizontalidad al norte de la Cordillera Cantábrica, que es continuada por los concejos de Llanera y Siero. El casco urbano ocupa una topografía accidentada, que se traduce en bruscos desniveles de más de 100 metros entre el barrio de El Cristo (315 m) y La Tenderina (190 m); normalmente se utiliza como referencia para el casco urbano la altura a la que se encuentra el Teatro Campoamor (227 m).